- Reforzar la organización popular de base: colectivos sociales, organizaciones políticas, consejos comunales, salas de batalla, comunas. Esto se logrará reencontrándonos con nuestra gente, haciendo los análisis de la coyuntura, diseñando el plan de trabajo (producción de alimentos en pequeña escala pero masificado, movilización y defensa territorial) y desplegándonos disciplinada y militantemente a su cumplimiento.
- No hay tiempo para dilaciones, todas estas acciones debemos concretarlas en el primer trimestre, pues se avecinan tiempos cada vez más complejos a los cuales debemos anticiparnos.
- El primer trimestre del año 2016 debe ser para sumar muchas voluntades y fuerzas productivas. El Plan Comunal de Defensa de la Revolución debe contemplar: 3.1 Producción de alimentos en pequeña escala pero masificado (el pueblo prosumidor: producir lo que se consume), sobretodo de cultivos de ciclo corto y cría de aves, pero no exclusivamente. 3.2 Socialización de nuestras experiencias productivas para masificarlas, en vías a sistemas de intercambio de alimentos respetuosas y armónicas con la vida colectiva. 3.4 Movilización, pues sólo un pueblo en la calle garantiza la rápida activación para avanzar en la ofensiva, sin permitir que sea la derecha quien nos defina la agenda. 3.5 Defensa territorial: este ha sido por mucho tiempo un tema tabú o en el mejor de los casos ambiguo, relegado sólo a grupos particulares. Si bien nuestro pueblo es pacífico, y precisamente por serlo, debemos defender nuestra paz para poder construir las alternativas populares para la superación de la crisis económica mundial del capitalismo que ya se hizo presente en nuestro gran país. Conozcamos nuestra comunidad y preparemos su defensa.
- Asumir como nuestra la propuesta del Presidente Maduro de tomar el control de los Abastos Bicentenarios para convertirlos en mercados comunales auténticos que no reproduzcan la lógica del Capital.
- Participar en los debates populares, académicos y todos los espacios públicos donde podamos defender lo justo e impostergable de la normalización del precio de la gasolina, para beneficio del pueblo. Es justo que se privilegie el transporte público, sobre lo privado. Además, tendremos mayores ingresos por esta medida para la inversión social y de paso se combatirá el contrabando de extracción.
- Ejerzamos organizadamente la contraloría social sobre los recursos aprobados para la Misión Transporte producto de la normalización del precio de la gasolina (30% de los ingresos), a los fines de evitar su desviación. Esto sólo podremos ejercerlo seriamente si contamos con organizaciones de base articuladas y movilizadas; en la dispersión está el fracaso popular.
- Estudiemos detenidamente el sistema de medidas económicas y sociales que aprobó el camarada Maduro este 17-02-16 y difundamos en todos los espacios populares su importancia para sostener los logros revolucionarios, garantizar condiciones de paz y seguir acumulando fuerzas para la contraofensiva y profundización de la Revolución Bolivariana.
jueves, 18 de febrero de 2016
Analisis de la Coyuntura actual por SURCO
Socialistas por la Unidad Revolucionaria hacia el
Comunismo (SURCO)
Análisis de la Coyuntura 17-02-16
La realidad actual
del país, que cambia hora tras hora, debe ser asumida con diligencia,
eficiencia y disciplina revolucionaria, por tanto nuestra organización de base,
analiza la situación nacional y fija posición al respecto.
En lo económico:
Luego de los
esperados anuncios del Presidente Nicolás Maduro en materia económica,
saludamos con beneplácito su decisión firme de avanzar hacia la consolidación de
la política alimentaria en el país, área que bajo los ataques de la burguesía
parasitaria ha generado condiciones económicas y sociales que han impactado en
la opinión política de la población venezolana, creando las condiciones para un
potencial retroceso en los espacios políticos conquistados en los últimos 17
años.
Consideramos un
acierto programático el evolucionar de un sistema de supermercados que favorece
a las grandes comercializadoras intermediarias (quienes normalmente no producen
nada) a mercados comunales controlados por las comunidades a través de sus
formas organizativas legítimas (espacios para el arrime de pequeños productores
y productoras con un sistema de intercambio a precios realmente justos). Ahora
bien, no basta con el anuncio, urge un músculo institucional de apoyo, con
recursos que ya se tienen, para garantizar entre otros aspectos el transporte
oportuno y a precio justo, no especulativo, y se requiere crear las condiciones
formales para garantizar el control de este proceso en manos del pueblo y no de
funcionarios que distorsionen la política.
La normalización del
precio de la gasolina era un clamor de pueblo, consciente de lo insostenible de
una gasolina regalada en tiempos de emergencia económica. No se trata de un
aumento, sino de su normalización a precio justo. Debemos garantizar que ese
30% dirigido a la Misión Transporte llegue a su destino para subsidiar los
costos del transporte público y no sea desviado para redes de corrupción que
sin duda aún persisten en el seno del estado burgués que se niega a morir.
¡Cuidado con la derecha, que utilizará esta justa medida para manipular e
incentivar la violencia! Ante ese escenario, movilización popular.
En lo político:
La derecha nuevamente
devela su verdadero rostro y lo hace con desparpajo al atreverse a proponer y
aprobar en primera discusión, con su mayoría mal habida en la AN, un proyecto
de Ley que legaliza y promueve el delito contra la cosa pública y en especial
contra los Derechos Humanos que de forma hipócrita dice defender. Una Ley que
pretende dejar en libertad a quienes han cometido delitos contra la Nación,
contra el pueblo y ha generado pérdidas humanas, no puede catalogarse menos que
como una Ley proterrorista; que es en esencia la política militar de la derecha
venezolana. Tratan de despertar de sus tumbas políticas a los que otrora fueron
públicos protagonistas de corruptelas, robos a los ahorristas y desfalco a los
bancos que luego fueron recuperados por el gobierno bolivariano, a quienes
llamaron a derrocar al gobierno con actos violentos, destrucción y quema de
autobuses, guarderías, instituciones y árboles, quienes cegaron la vida a
venezolanas y venezolanos inocentes usando guayas y armas de fuego formales e
improvisadas. Pero no conformes con esto, se atreven a proponer como fecha de
alcance de esa aberrante Ley, la de su promulgación, es decir, promueve la
comisión de todos estos delitos en el presente, pues según la derecha, quien
los cometa y diga que piensa distinto al gobierno, quedará absuelto
automáticamente. Esto es sin duda una provocación.
¿Qué hacer?
Tenemos una historia
de luchas incuestionable; hace pocos días celebramos los 197 años del Discurso
de nuestro Libertador Simón Bolívar en el Congreso de Angostura en 1819, lo que
nos da razones de sobra para sentir el orgullo patrio y gritar al mundo que la
República Bolivariana de Venezuela es el germen de la Patria Grande
Nuestroamericana.
Tenemos razones de
sobra para asumir la vanguardia, esa vanguardia colectiva a la que nos convoca
nuestra Constitución Bolivariana. La vanguardia colectiva en lo productivo,
formativo y organizativo. La activación y movilización será nuestra mayor
fortaleza para afrontar los grandes desafíos por venir. En este contexto
debemos:
SURCO / GPP-PSUV.