Bush viaja del 1 al 5 de diciembre a Zambia, Tanzania y Etiopía, en el marco de una gira de promoción de los programas de salud, principalmente basados en la lucha contra el cáncer de cerebro y de pecho.
En un comunicado, Amistía Internacional afirma tener “suficientes pruebas de dominio público, que emanan de autoridades estadounidenses y del mismo George W. Bush, para pedirle a Etiopía, Tanzania y Zambia que abran una investigación sobre la presunta responsabilidad de actos de tortura y para garantizar su presencia durante la investigación”.
Bush es acusado de haber autorizado métodos de tortura en Estados Unidos bajo la cobertura de “guerra contra el terrorismo” en los años 2000.
“Todos los países a los que George W. Bush viaja tienen la obligación de presentarlo a la justicia por su rol en actos de tortura”, afirmó Matt Pollard, consejero jurídico de Amnistía.
En octubre Amnistía tomó la misma iniciativa antes de un viaje del expresidente estadounidense a Canadá para una conferencia. Ottawa acusó entonces a Amnistía de “bancarrota moral”, “degeneración y politización”.
En febrero Bush anuló una visita a Suiza luego de que se hicieran llamados similares.