El 23 de enero de 1958 representa, en la historia contemporánea de nuestro país, un punto de quiebre con las dictaduras abiertas que se impusieron en América Latina para impedir el avance del programa histórico popular, sembrado desde los tiempos de nuestra Independencia.
A partir de esta fecha, otras formas de opresión surgen con la llegada de las llamadas democracias representativas que, usurpando la voluntad popular, entregando el país a los más oscuros intereses de las economías del norte, llevando lentamente a la miseria a nuestros campos y ciudades, persiguiendo y masacrando nuevamente a quienes se jugaron la vida para lograr el derrocamiento de Marcos Pérez Jiménez, hicieron de la Venezuela liberada de la dictadura, la esclava de la nueva casta burguesa.
Pero como todo pueblo de historia combativa, forjado por el fuego sagrado de su legado emancipador, las fuerzas organizadas del 58 continuaron vivas, a la espera del momento oportuno para retomar las calles y plagarlas de la gloria revolucionaria.
Hoy, 23 de enero de 2012, salimos alegres a hondear el rojo de nuestras banderas para conmemorar nuestras luchas y celebrar que la siembra de miles de hombres y mujeres ha florecido en una generación que mira al futuro con la cabeza en alto, con la dignidad que da el tener cada vez más acceso a la salud, al trabajo, a la vivienda y a la máxima libertad que puede otorgarse a un pueblo: la EDUCACIÓN para todas y todos.
Así, desde el Colectivo Social SURCO, con su militancia del pueblo, compartimos este momento y reafirmamos el compromiso de no retroceder “ni un tantico así”, como diría el Che Guevara, el programa bolivariano y su gesta internacionalista.
¡PROHIBIDO OLVIDAR!
PATRIA SOCIALISTA
VIVIREMOS Y VENCEREMOS
Osly Hernandez.-
